Tras la Estación de Penitencia del pasado Viernes Santo, Nuestra Madre y Señora del Patrocinio y el Santísimo Cristo de la Expiración regresan a sus altares en el tiempo pascual. La Virgen del Patrocinio luce la saya bordada sobre terciopelo burdeos de las Hermanas Antúnez y manto azul marino con bordados toreros.